VISION DIGITAL HACIA UNA NUEVA ERA
Repensando el rol directivo tecnológico
La 4ª Revolución Industrial que vivimos es, como su nombre bien lo indica, una auténtica revolución que no solo va a transformar radicalmente la forma en la que se producen y se consumen bienes y servicios, sino que también está teniendo ya un gran impacto en el mercado laboral y en el empleo. Con el avance de tecnologías disruptivas como la Inteligencia Artificial, Internet of the Things, Blockchain, Cloud Computing, etc., se están automatizando muchos procesos que hasta ahora requerían de trabajadores con unos perfiles muy definidos, cuyas competencias se basaban, en muchos casos, en la memorización y repetición de tareas tras un proceso de capacitación en institutos y universidades.Si ya de por sí el cambio estaba siendo acelerado en un entorno complejo e incierto, en este año 2020, nos hemos encontrado con un evento inesperado, un evento “cisne negro” de gran impacto sanitario, económico y social: la pandemia del coronavirus COVID19. En apenas meses, esta pandemia global ha acelerado al menos cinco años lo que ya de por sí era una prioridad de numerosas organizaciones: la transformación digital. Pero no hablamos de simples mejoras en el servicio usando canales digitales, hablamos del surgimiento de la necesidad de desarrollar verdaderos procesos de reinvención de la propuesta de valor con soluciones disruptivas que amenazan los modelos de negocio tradicionales, y que tienen un gran impacto en las organizaciones y en el conjunto de la sociedad.
Por otro lado y sin duda alguna, la robotización masiva, el uso de canales digitales, el auge del comercio electrónico B2C y las nuevas redes logísticas, el teletrabajo y la teleformación, así como el uso masivo de los datos y de los algoritmos de inteligencia artificial, van a recibir un nuevo impulso como consecuencia de los nuevos retos que nos plantea el escenario post-COVID19.